quizas.

Aunque el yo poeta que nace cada vez que ella me mira se sienta aprisionado en la paredes de mi cuerpo, esto es un homenaje a la mujer que me empujo a los confines de mi recipicio, es ella la que teme que yo, sea quien soy, ¿puedo cambiarlo?, ¿debo?.

lunes, 14 de junio de 2010

¡Soy como el chile verde!



hace frio, no, hace calor, el mundo da tantas vueltas y de pronto, se queda quieto... y la inercia hace que nos vallamos de bruces y nos raspemos las rodillas, la cabeza nos da vueltas como antes lo hacia el mundo y nos vuelve sabios y locos, si no se tiene cuidado nos deja realmente estúpidos...quiza ya lo somos y solo jugamos a no serlo cuando caminamos a deshoras de la noche con un cigarro en la boca contando nuestros pasos, si es un dia con suerte brincamos en algún charco y nos mojamos los pies,el alma y nos damos una esperanza que quiza ya no exista.


Subimos al transporte público y nos sentamos, miramos por la ventana y nos creemos observadores, criticos, nos enamoramos de una mujer que cruza la calle con su perro y un paragüas y nos damos la esperanza de volver a verle, es entonces cuando caemos en la rutina... una rutina obsesiva, una que nos impulsa a ala muerte.


Llegamos a la casa y nos limpiamos los pies en el tapete de la entrada, nos quitamos la playera, nos quitamos zapatos y secamos el cabello, subimos al cuarto y nos desnudamos, vemos nuestro cuerpo joven o quiza viejo y nos metemos en la cama, vemos el techo, escribimos historias y la borramos con los dedos, somos muy habiles para borrar con los dedos.


Entonces suena el telefono, no queremos contestarlo, algún debil extiende la mano y dice "bueno"...


puede que un bueno rompa el embrujo y nos podamos ver una vez más como un niño en vispera de nacer...o como un viejo a la puerta de la muerte....


Hay tres vicios que se nos antoja al terminar la llamada, el amor, el silencio y la vida...que deliciosos son los labios de las tres...tan puros e irrepetibles, tan perfectos e inalcanzables...

dejemos de pensar en espejismos.


entonces suena el telefono de nuevo, es la cancion que me trae morfeo...

...ayer maravilla fui llorona...ahora ni sombra soy...


amigos, somos como el chile verde, todas mis pesonalidades lo somos... no te extrañes si un dia terminas por pensar en mi, en nosotros...en nuestros viajes, en nuestras personalidades o en nuestras extrañas foprmas de amarnos en silencio, de odiarnos a todas horas y formas posibles...susurrando y soñando con el último trago de mezcal.

1 comentario:

  1. Me haz dejado encantado.

    Recibe un saludo de un patético hombre que juega a escribir... de un nefasto chile verde.

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